28 ene 2013

El insomnio, la privación del sueño, la negación del subconsciente, el rechazo a uno mismo. Las 4 de la mañana y no tengo ganas de irme a la cama por que se que hoy no he hecho nada, no he aprendido nada nuevo ni he cambiado un ápice de mi vida, sencillamente he pasado el día aquí, delante del ordenador, como si esta pantalla no hubiera medrado mi capacidad de crear o pensar, como si esta mierda me alimentara lo suficiente como para pasar los días. No puedo acostarme así, no puedo descansar sabiéndolo, no puedo relajarme y esperar que mañana sea mejor, que mañana vaya a cambiar. Necesito algo que me haga pensar, cualquier cosa, cualquier idea, filosofía, matemáticas, química, física, medicina, literatura, poesía  dios mio, cualquier cosa sea bienvenida.
Necesito acostarme sabiendo que soñare con aquellos parajes blancos, fríos y nevados que describía Jack London, pararme allí  a descansar, a leer, versos de cualquier mano, salidos de cualquier boca cualquier noche de borrachera. Necesito pensar que hoy, por inútil o pequeño que sea, he aprendido algo.

27 ene 2013

Domingo, cerca de las 12 y aun no tengo un tema para escribir, soy joven, pero supongo que escribiré sobre como ha cambiado mi vida y el sitio que el alcohol tenia en ella y ademas, le dedicare unas palabras que tenga endeudadas a una desconocida.
Y es que antes bebía  empece a beber por que creía que mi vida era una mierda, luego para divertirme, luego por que me di cuenta de que mi vida de verdad era una mierda, cuando encontraba quien me consolara bebía por que era feliz, y cuando la mujer que me consolaba me dejaba o yo la cagaba me limitaba a beber, aun mas, beber hasta rendirme, hasta darme cuenta por enésima vez que bebiendo no se arregla nada. Ya no bebo tanto, no se si lo necesito o sencillamente se ha vuelto tan usual en mi que soy incapaz de apreciar el papel que juega conmigo. Pero en cierto modo bebía para que la vida pasara, y pasaba como las escenas sin concordancia de una mala película de esas que lo intentan pero nunca te hacen pensar. Y ahora, a cada momento que me paro a observar mi vida me doy cuenta de que pasa de forma acelerada a través de mi, que me hace vibrar, y que yo, mal construido, con malos cimientos y un mal cemento para las paredes, me agrieto, me rompo. Me han jodido mucho, me han jodido bastante, no tanto como para rendirme pero si lo bastante como para quejarme, y por mucho que me duela admitirlo aun no me he vuelto insensible, al menos no con la parte que debo. Así que supongo que esto es una declaración de intenciones, de que lamento no haber bailado con una copa en la barra de un bar esta noche, una forma de deciros que el alcohol, nos captura jóvenes y jamas nos suelta, de que beber no es una solución, ni un buen camino. 
Yo seguiré bebiendo, por que es autodestrucción  por que necesito romperme para crear, y el alcohol es un camino rápido, es una buena forma de llegar a palpar lo que uno siente, palparlo de verdad, con las yemas de los dedos hundidas en lo hondo del pecho.  Seguiré rompiendo mis sueños, quemando mis noches, llenando de humo mis pulmones, buscando dejar el rastro de cualquier puta en mi cama y esa peste a cerveza y alcohol barato en la cara.

Y ahora dedico una pequeña mención a aquella desconocida con la que endeude unas palabras, ni tan siquiera se si leerá esto, pero estos últimos días se ha sumido su sombra en mi cabeza, no se quien es, no se nada de ella, no tengo un nombre, una cara, un color de ojos, unas ideas, unos gustos, no se por que camino quedan sus huellas ni donde va dejando el ligero olor de su perfume. Y supongo que eso es lo que mas me hace pensar en ella, en el peso que puede tomar una desconocida que tan solo me ha dedicado unas palabras, en lo mucho que me gustan los desconocidos, por que puedes entregarte a ellos con total seguridad de que no te juzgaran, aunque no sepas nada de ellos, por que no saben nada de ti.